Las patatas fritas de bolsa son uno de los aperitivos preferidos por todo el mundo. Pocas personas pueden resistirse a este crujiente y sabroso bocado, y una vez que te comes una, es difícil parar. Además, son un recurso económico y delicioso para servirse en fiestas, celebraciones, aperitivos, pícnics, en definitiva en cualquier ocasión en la que se quiera picar algo. Este éxito es lo que ha llevado a las marcas a sacar a la venta un montón de variedades diferentes de este producto. Así pues, cuando nos apetecen unas papas fritas, debemos decidir entre un montón de opciones: clásicas, onduladas, diferentes tipos de corte, con más o menos sal, con diferentes sabores…
7Patatas fritas Bonilla a la vista
Estas patatas fritas no son solo de bolsa, sino que se comercializan también en lata. De esta forma se mantienen enteras y protegidas de golpes que las puedan aplastar. Están fabricadas en Galicia, y son un producto tan tradicional que se remonta al año 1832, cuando la familia Bonilla empezó a vender patatas en sus churrerías. Hoy día siguen siendo unas patatas gourmet, con el grosor perfecto y supercrujientes, fritas en el mejor aceite de oliva. La bolsa de 150 gramos sale a 2,70 €. La lata de 250 gr. cuesta sobre los 11 €.