El insomnio es el gran enemigo de la productividad. Cuando dormimos bien tenemos energía para afrontar lo que venga, pero cuando nos faltan horas de sueño, la máquina, o sea nuestro cuerpo, empieza a ir más lento y retrasar las diferentes tareas que debemos hacer en el día. Aunque mucha gente no lo sepa, hay diferentes alimentos que contribuyen a que no podamos dormir por la noche. Te contamos cuáles son para que no caigas en el error de tomarlos y convertirte así en la causa de tus propios males.
6La cafeína no es lo único que aplaca el sueño
La cafeína es un fuerte inhibidor del sueño, pero no es el único. Hay otros alimentos que, aún sin cafeína, logran aumentar el metabolismo y combatir el sueño. Los productos más comunes que se utilizan para esas noches en las que necesitamos estudiar porque no llegamos o hay que mantenerse despierto por cualquier otra razón: café, chocolate, té de yerba mate, té negro, té verde, refrescos de cola, guaraná en polvo, bebidas energéticas (como Red Bull, Gatorade, Fusión, TNT, FAB o Monster), pimienta y jengibre. Algunas personas no evitan la llegada del sueño con la cafeína. Su efectividad depende de la tolerancia del cuerpo de la persona a dicha sustancia y la calidad.