El aceite es uno de los ingredientes indispensables para que podamos hacer bien prácticamente cualquier elaboración. Hay algunas preparaciones de fritura, como es el caso de los empanados, que generan que este líquido viscoso se vaya poniendo cada vez más negro hasta que termina convertido en una masa espesa llena de grumos requemados. Cocinar en estas condiciones se vuelve insalubre, por lo que conviene tener siempre el aceite lo más limpio posible.
2Se puede alargar su vida
Debido a estas razones que acabamos de exponer, es muy importante que aprendas cuanto antes a mantener limpio el aceite. Evitar que tome sabor y aspecto de quemado es mucho más sencillo de lo que piensas. Solo tendrás que hacer uso de unos productos que todos deberíamos tener en la cocina. El primero de ellos es un trozo de pan. Casi todos tenemos pan en casa, aunque sea integral o de molde. La magia del pan es un gran absorbente en líneas generales para todo tipo de líquidos. Cuando mojamos el pan en leche se deshace muy rápido. Cuando la magia se pone en contacto con aceite que tiene restos quemados, el pan es como un imán.