Es su sueño y así se lo ha hecho saber a su entorno más íntimo. El consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, quiere convertirse en ministro. Lo quiso desde hace años, pero su ataque a la sanidad pública le salió caro. Ahora que ha vuelto a la primera línea de la política ha recuperado la idea de ser ministro de Economía, razón por la que se ha acercado a Alberto Núñez Feijoo para tantear la posibilidad de entrar en su futuro Gobierno, siempre que gane las elecciones. El problema es que estos tanteos que Fernández-Lasquetty está dejando ver en Génova los lleva con extrema discreción dado que sabe que el ojo de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, vigila.
El líder gallego prometió no meterse en la política madrileña. A cambio de que Ayuso no se presentara a liderar el PP, Feijoo se comprometió a no interferir en la política madrileña, pero lo cierto es que el presidente popular no se atreve ni siquiera a robar «ayusistas» para su causa. Con lo que no contaba el expresidente de la Xunta de Galicia era con que le buscaran por los pasillos de Génova para dejarse puertas abiertas. Fernández-Lasquetty es discreto, pero no deja de coquetear con la idea de ser ministro ni quiere cerrarse la puerta. El problema añadido es que ya hay un ejemplo de un consejero que mantuvo una actitud similar a la de Fernández-Lasquetty en Sol y no salió bien.
El consejero de Presidencia e Interior, Enrique López, quiso ser ministro de Justicia, pero no eligió del todo bien al candidato. El ejemplo de López coqueteando con Pablo Casado para que se quedara abierta la puerta del Ministerio de Justicia recuerda mucho a los intentos de Javier Fernández-Lasquetty de convertirse en el nuevo Cristóbal Montoro del PP. Fuentes de Génova dejan claro que Fernández-Lasquetty coquetea con la idea desde hace tiempo de ser ministro de Economía y aseguran que siempre que puede deja caer que está disponible para lo que Feijoo necesite. Lo que va en su contra es que el clan gallego no se atreve a pescar personalidades en el PP de Madrid.
Javier Fernández-Lasquetty tiene claro que Sol se le queda corto y sabe que goza de la confianza tanto de Isabel Díaz Ayuso como de Miguel Ángel Rodríguez, su jefe de gabinete. Pese a que todos son conscientes en el PP de Madrid que Fernández-Lasquetty aspira alto, lo cierto es que el consejero está siendo muy discreto a la hora de lanzar sus guiños a Feijoo. De momento, no quiere significarse más de la cuenta, según cuentan fuentes de su entorno y algún que otro director general cercano al consejero, pero lo cierto es que Fernández-Lasquetty tiene claro que su futuro está en el Consejo de Ministros y no en Sol.
Las pretensiones de Fernández-Lasquetty no son ajenas a otros consejeros, pero el ego del conocido popular le ha llevado a considerar que le tendrán muy en cuenta pese a ser parte del ala dura del PP. Feijoo de momento no ha salido de su círculo gallego y no se plantea nada más allá de lo que se hable en el grupo de Whatsapp de seis personas. Pero esto no quita con que habrá cuotas si gana las elecciones y colocará en el Consejo de Ministros a populares de todas las sensibilidades. Incluidos del ala dura del PP a la que pertenece Fernández-Lasquetty.
El único problema que teme el consejero es que, tal y como cuentan fuentes de Génova, Feijoo de momento no se atreve a buscar candidatos o populares en Sol. La Comunidad de Madrid no es solo un lugar en el que no quiere entrometerse para evitar choques con Isabel Díaz Ayuso, sino que también es un nicho donde entiende que no encontrará dirigentes afines a sus sensibilidades. En cualquier caso, Fernández-Lasquetty está absolutamente convencido de que tiene opciones reales de ser ministro de Economía pese a que no le fue demasiado bien a Enrique López.