La total y absoluta ausencia de Yolanda Díaz y su formación Sumar de las elecciones autonómicas y municipales ha empujado a las demás pequeñas formaciones que esperan incluir sus siglas bajo el amparo de la vicepresidenta a echarse en brazos de Podemos. El problema es que desde la formación morada han cogido la matrícula a todos los partidos que quieren echarse en brazo de los de Ione Belarra para después, en las generales, irse con Yolanda Díaz. Especialmente tienen puesto el ojo tanto en Izquierda Unida como en Alianza Verde, porque desde Podemos aseguran que «son conscientes» de que quieren irse con la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo en otoño pese a que ahora no tienen problema en pactar con Podemos.
Unidas Podemos ya es historia pese a que estén en el Gobierno y pese a que tengan un grupo parlamentario. No queda absolutamente nadie que se crea dentro de los morados se va a mantener la unidad. Los diputados de Unidas Podemos han montado sus propias formaciones o directamente se han sumado a otras, dejando a Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, y a Irene Montero, ministra de Igualdad, completamente solas dentro del partido que fundó Pablo Iglesias. Juan López de Uralde y Alberto Garzón, dos de los integrantes de Unidas Podemos con más importancia, son algunos de los que han reforzado sus siglas para renovar los pactos de izquierdas antes de las elecciones. El problema, según Podemos, es que lo han hecho de cara a las autonómicas y las municipales y no saben lo que harán de cara a las generales.
Desde Podemos son conscientes de que una hecatombe puede tener lugar en otoño si Yolanda Díaz juega bien sus cartas. Sospechan que Irene Montero y Pablo Echenique, por poner dos ejemplos, no tendrán ninguna cabida en el equipo de Yolanda Díaz; mientras que otras como Ione Belarra han hecho saltar las alarmas por su buena relación con la ministra de Trabajo y vicepresidenta del Gobierno. En toda esta ecuación, desde Podemos se muestran absolutamente «convencidos» de que Alberto Garzón y Juan López de Uralde, líder de Alianza Verde, tienen intención de integrarse en Sumar tan pronto como el eterno y sordo proceso de escucha de Yolanda Díaz llegue a su fin.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, se quedará fuera de juego. O al menos para ser candidata tendrá que quedarse en Podemos al margen de Sumar. Pero el problema está en que hay muchos que ahora están pactando con la formación de Irene Montero en comunidades autónomas como el País Vasco o Murcia mientras que tienen planes, a sus ojos, de irse con Yolanda Díaz dejando atrás a quienes ahora les están dando cobijo. Juan López de Uralde y Alberto Garzón son los dos señalados por todo esto porque tienen mucho peso en la izquierda y porque querrían confirmar que irán con ellos a las elecciones generales.
Podemos vigila de cerca a estos dos diputados porque saben que afrontan una guerra abierta entre Yolanda Díaz y los integrantes de Podemos y necesitan toda la artillería posible en sus filas. Pero ni siquiera están seguros ahora mismo de que la secretaria general vaya a permanecer bajo el amparo de las siglas que fundó Pablo Iglesias dadas las últimas informaciones. La idea inicial de Podemos es negociar la integración con Sumar, pero tienen un problema: necesitan la máxima fuerza posible y contar de inicio con Alianza Verde e Izquierda Unida para forzar que Yolanda Díaz dé el brazo a torcer y acceda a las demandas de Podemos. Sin embargo, desde la formación morada insisten en que están absolutamente convencidos de que Juan López de Uralde y Alberto Garzón quieren montar coalición con la vicepresidenta del Gobierno, quien está siendo extremadamente paciente para lanzar su mensaje.
