sábado, 23 noviembre 2024

El Congreso vota hoy la propuesta de Vox de reprobar a la ministra Sánchez por los trenes de Cantabria

La Comisión de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del Congreso someterá a debate y votación una proposición no de ley de Vox para pedir la reprobación y destitución de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, tras la polémica de los trenes en Cantabria y Asturias.

En concreto, los de Santiago Abascal piden en su propuesta, la reprobación de la ministra por sus acciones «en perjuicio del interés general, su flagrante incompetencia y su indiferencia» ante las consecuencias de las actuaciones llevadas a cabo.

Y, en el segundo punto de la propuesta, Vox insta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a destituir «de forma inmediata» a la titular de Transportes.

Un error de ancho métrico impidió que unos trenes en Asturias y Cantabria pudieran entrar por los túneles por los que tenían que circular. Esto provocó las dimisiones del presidente de Renfe, Isaías Táboas, y la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera. A estas dimisiones hay que sumar los ceses del jefe de Inspección y Tecnología de Adif y del responsable de Gestión Material en la Dirección Técnica y de Operaciones de Renfe.

A juicio de Vox, todos estos episodios han desembocado en un «despilfarro de dinero público» y en un retraso en la fabricación y entrega de los trenes. Todo ello, dice el grupo, con la consiguiente privación a los españoles de Asturias y Cantabria de su derecho a las infraestructuras de transporte.

Asimismo, el grupo denuncia que la ministra del ramo ha ocultado «dolosamente» toda esta información a los españoles, y en absoluto ha reconocido, ni mucho menos asumido, su responsabilidad como máxima dirigente del ministerio.

«Al contrario, ha optado por destituir a cargos intermedios que probablemente no adoptaban la decisión final y, lo que es peor, los ha sustituido por otros de dudosa competencia profesional», denuncia Vox.

El nuevo presidente de Renfe tras la polémica es el exsecretario general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, Raül Blanco; mientras que David Lucas, previamente secretario general de Agenda Urbana y Vivienda, es el que ha pasado a ostentar la secretaría de Estado de Transportes.