La estrategia política de Yolanda Díaz ya va quedando en evidencia, a medida que se acerca la época de las campañas electorales, de cara a las elecciones municipales, autonómicas, que serán en mayo, y las generales, que serán en noviembre. La líder de Sumar comienza a venderse como la política «mejor valorada» en España, ubicándose por delante hasta del presidente Pedro Sánchez.
De momento, la ministra de Trabajo no ha oficializado su intención de concurrir con su plataforma política a las elecciones generales, a pesar de que desde Podemos no dejan de repetirle que la apoyarán y que desean que sea una candidatura de coalición, pero ahora, con cifras en mano, Yolanda Díaz comienza a mostrar a la opinión pública que con Sumar podría obtener una importante tajada de los votos del partido morado y hacerle la competencia al PSOE en pleno.
Sumar arrancó la semana mostrando unas cifras que, si bien es cierto, favorecen de lleno a la vicepresidenta segunda de Gobierno, las cifras no muestran demasiada credibilidad, porque entre los liderazgos más destacables aparece el nombre de Íñigo Errejón ubicado en el tercer lugar de esa encuesta, que de acuerdo con la gráfica fue elaborada por la compañía Simple Lógica, muy por encima de Alberto Núñez Feijoo, que es el principal líder de la oposición española.
De hecho, la gráfica muestra que el liderazgo del líder del Partido Popular es el que más ha caído a lo largo del último año, pues el año pasado aparecía en la misma tabla por encima de todos los nombres de los políticos de la lista.
El detalle de esta encuesta comparativa es que con esos números, Yolanda Díaz se ubica como líder política absoluta de España, capaz de arrastrar a la cantidad suficiente de votantes para consolidarse como una posible figura presidenciable, en el caso de que el PSOE accediera a darle su respaldo tras las elecciones generales.
En el cuadro comparativo que publica Sumar, donde cita cifras de Sociométrica, la plataforma política de Yolanda Díaz (Sumar), obtendría por lo menos el 18,2% de los votos en las elecciones generales, borrando del mapa político a Podemos y poniéndole al PSOE apenas 2,7 puntos por encima, con un 20,9% de los votos que obtendrían estas fuerzas políticas en unas elecciones.
Lo curioso es que en los números que publicaron en las redes se Sumar, no aparece Podemos por ninguna parte en la cantidad de votos que podrían obtener, y en cuanto al cuadro de liderazgo, la líder del partido morado aparece de penúltima, por debajo incluso de figuras como Pablo Iglesias y hasta por debajo de Santiago Abascal de Vox.
Con este panorama, queda más que claro que lo último que quiere Yolanda Díaz para su carrera política, de aquí en adelante, es nada que tenga que ver con Podemos o sus figuras más representativas, pues tiene muy presente que las figuras de Ione Belarra e Irene Montero han resultado demasiado tóxicas para la izquierda española.
Lo que la vicepresidenta segunda de Gobierno no está tomando en cuenta, con sus gráficas, es que, de acuerdo con esos números, el PP tendría la opción de coronarse para formar gobierno, en alianza con Vox, pues entre ambas fuerzas políticas obtendrían por lo menos el 46% de los votos en las elecciones generales, dejando muy por detrás al PSOE.
Sin embargo, Sumar se presenta casi como la única alternativa para el PSOE para que puedan permanecer en el poder, por lo que sería la vía que la ministra de Trabajo es aferrarse a su plataforma política, a ver qué tanto puede levantar de aquí hasta noviembre y potenciar su liderazgo para minimizar el de Pedro Sánchez, que también trabaja en su permanencia en el poder, pero que a la larga esta situación no le quita del todo el sueño, porque la meta es asegurarse un cargo en Europa, que le permita vivir de la política durante algunos años más.
No obstante, habrá que esperar que Yolanda Díaz haga sus movimientos y anuncie formalmente qué es lo que pretende lograr con Sumar, porque de momento, solo es una plataforma o si se convertirá finalmente en un partido político que termine de enterrar a Podemos y sus aspiraciones de aferrarse al poder, a pesar de que a lo interno saben que el liderazgo está en terapia intensiva y que no consiguen la manera de lograr que Yolanda Díaz les dé cabida en su proyecto político.