Ikea es una multinacional conocida por muchas cosas. Vende muebles de alta calidad que generalmente te montas tú mismo, tiene una gran gama de precios, apuesta por el reciclaje y la sostenibilidad, es responsable de montar centros comerciales enteros como Río Shopping e incluso tiene su propia cafetería para que podamos parar a comer después de un duro día de compras.
Eso sí, por lo que realmente es conocido es por sus nombres extremadamente extraños para los muebles y enseres que vende. Es como si hubieran cambiado el típico código de un producto por un nombre extraño, que muchas veces nos suena, pero otras veces es sueco y no sabemos que es. Lo cierto es que todo tiene una explicación y se basa en una particularidad de su fundador. Hoy hablaremos de estos nombres extraños, explicando el origen de cada uno.
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2La dislexia está detrás
Una de las razones por las cuales se han implementado estos nombres tan raros de Ikea es la dislexia del fundador de la marca. Ingvar Kmaprad era disléxico, así que tenía muchas dificultades para memorizar los códigos.
Como le era demasiado complicado memorizar un código, decidió crear un sistema más simple que acabaría siendo un emblema en la compañía. Utilizó el sistema de nombres muy familiar para los suecos.
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