Si tienes invitados y quieres darles la sorpresa de su vida, la receta perfecta para que los dejes con la boca abierta es esta: gambas a la gabardina. Una tapa tradicional que no puede faltar si tienes a todas las personas que quieres sentadas a tu mesa. Te traemos los trucos que no sabe nadie para que tus gambas salgan crujientes por fuera y jugosas por dentro. Una delicia que tus amigos solo podrán encontrar en tu casa.
6Gambas a la gabardina: crujientes y jugosas
La idea es que el papel de cocina absorba la mayor cantidad posible de aceite. Lo rico de las gambas a la gabardina es que estén crujientes, no aceitosas. Lo recomendable es que se sirvan recién hechas. Conservarán todo el sabor y estarán riquísimas.