Las manos son una parte del cuerpo imprescindible en la comunicación y a todos nos gusta llevarlas bien cuidadas. Por este motivo, comerse las uñas puede afectar a nivel visual y provocar un problema social. Sin embargo, esto no es lo único que te debe preocupar.
Este mal hábito, llamado onicofagia, es un problema muy común que está también estrechamente relacionado con la ansiedad. Todo ello hace que gestionar bien las emociones sea el primer paso para dejar de hacerlo.
¿Lo sabías? Descubre los problemas de salud que acarrea comerse las uñas todos los días.
3Estos son los problemas que puede causar comerse las uñas
Comerse las uñas afecta a la persona en varios niveles. Como indican los expertos, es un hábito que afecta a nivel físico, ya que puede provocar sangrado en la zona, infecciones de distinto grado, así como la desconfiguración de los dedos. A nivel emocional también afecta, ya que puede provocar frustración por ser un hábito muy complicado de controlar y gestionar. Por otro lado, destaca cómo afecta a nivel social, ya que es muy poco atractivo el tener las manos con las uñas mordidas, lo que causa una mala impresión sobre la imagen de la persona.
