La recuperada capacidad de transporte estrategico del Ejército del Aire y del Espacio con sus “nuevos” aviones Airbus A330 ha sido fundamental para el rápido despliegue de la Unidad Militar de Emergencia (UME) para colaborar en la extinción de los grandes incendios forestales que está sufriendo Chile.
Ante la petición de ayuda del Gobierno de Santiago de Chile, el de Madrid decidió socorrer a los chilenos de manerá inmediata, utilizando los magníficos instrumentos que le otorgan las Fuerzas Armadas (FAS) españoles, en concreto asignando la misión a la Unidad especializada en combatir catástrofes, que es la referida UME.
El dispositivo está compuesto por un equipo de asesores, expertos en la Lucha Contra Incendios Forestales (LCIF), así como una sección de intervención con capacidades específicas como aeronaves no tripuladas o Unmanned Aerial Vehicle (UAV) y comunicaciones satélite para apoyo al Mando y Control.
Pero para poder atender la solicitud del Gobierno de Chile, España se ha de desplegar el contingente de la UME al otro lado del mundo, dado que en este caso en concreto entre Madrid, la citada Unidad tiene su principal sede en la madrileña base aérea de Torrejón, y Santiago de Chile es de 10.695 kilómetros. Así además se necesita del concurso del Ejército del Aire y del Espacio, que afortunadamente en la primavera de 2022 recuperaba su capacidad de transporte estratégico, perdida en 2016 con la baja de los míticos Boeing 707. Actualmente el 45 Grupo del referido del Ejército del Aire y del Espacio opera en dicho rol con dos Airbus A330-200, adquiridos a través de un contrato con Airbus Defence & Space (DS), a la compañía española de bandera Iberia. Así, el personal de la UME, unos 50 efectivos, embarcó en uno de dichos A330, la mañana del pasado domingo 5 de febrero, y partia poco después, junto a su material que pudo ser perfectamente estibado en las amplias bodegas de carga del aparato, llegando a Santiago de Chile en vuelo directo, unas 14 horas después. Estamos ante una baza muy importante para el prestigio de España, que no es solo la de poder ofrecer la ayuda, sino la de contar con la posibilidad de proyectarla en menos de 24 horas a cualquier punto del mundo de forma totalmente autónoma.
Estamos ante un viaje muy diferente al efectuado al mismo destino en enero de 2017,y por los mismos protagonistas, 56 efectivos de la UME, ya que en aquella ocasión se hubo de recurrir a uno de los aviones más antiguos y con mucho menor alcance Airbus A310, también del 45 Grupo. Dichas capacidades obligaron a realizar al menos una escala en el trayecto para repostar, lo que alargó el viaje a unas 24 horas, con el consiguiente mayor cansancio de unos profesionales, que nada más desembarcar empiezan un intenso trabajo. Igualmente, tras la brillante labor del personal de la UME en las labores de extinción durante la ola de fuegos de aquel invierno (verano por estar en el hemisferio sur), se hubo de recurrir a un avión Airbus A340 civil (muy similar al A330), fletado por la UE, para replegarse. El personal de la UME en aquella misión, dejó atrás, además de los espontáneos aplausos de agradecimiento en el aeropuerto de Santiago durante su embarque, el buen entendimiento y eficaz coordinación con el resto de servicios de emergencias locales y el aprecio general del pueblo chileno.
Ahora de nuevo, el objetivo principal del despliegue es ofrecer al Gobierno de Chile un apoyo especializado con capacidades técnicas como el análisis y asesoramiento en materia de LCIF y refuerzo de la estructura de Mando y Control con los UAV (Mavic y Matrice 300 para grandes áreas y Helios para espacios confinados) así como con enlaces satélites.
El dispositivo aportará también la experiencia en España ante los incendios de interfaz urbano-forestal, una de las amenazas que más preocupa a los responsables chilenos.
Chile atraviesa una profunda sequía y desde el pasado mes de diciembre la zona central del país inició la campaña de lucha contra incendios con intensidad. El aumento del número y magnitud de los incendios forestales en Chile desde el 3 de febrero, agravado por los fallecidos y las numerosas evacuaciones de vecinos han conducido a solicitar esta colaboración entre los dos países en materia de lucha contra incendios forestales.
Cerrando con la también eficaz papel del 45 Grupo, se debería de resaltar, que su ya importante capacidad de transporte estratégico, se complementará con la conversión de estos dos aviones a la variante militar con capacidad de reabastecimiento en vuelo a otros aviones o Multi-Role Tanker Transport (MRTT), una compleja transformación, que ya se está efectuando en el tercer A330, que operará el 45 Grupo, en la planta de la multinacional de Getafe (Madrid).
