viernes, 22 noviembre 2024

El PSOE de Madrid y Alcalá de Henares dan el portazo a Mónica Silvana: «No hay hueco para ella»

Desde el PSOE de Madrid y la propia delegación del partido en Alcalá de Henares tienen claro que «no hay hueco» para Mónica Silvana, la eurodiputada condenada por el Parlamento Europeo por acoso laboral a sus asistentes. Fuentes directas y del más alto nivel del PSOE de Madrid han asegurado con contundencia a MONCLOA.com que Silvana, quien sabe que no repetirá en las listas de las elecciones europeas, no tiene ningún hueco disponible en el partido. Estas mismas fuentes aseguran que Silvana ha coqueteado con la idea de volver a Alcalá de Henares, pero desde el PSOE de Madrid dejan claro que no tiene espacio en este partido. Y mucho menos en la Asamblea de Madrid, donde Juan Lobato quiere sangre nueva que no esté manchada por las polémicas.

Mónica Silvana tiene claro que no la quieren en el partido en la capital. Desde el entorno de Juan Lobato, secretario general del PSOE de Madrid, son conscientes de que Silvana quiere seguir viviendo de la política y mantener un elevado sueldo en algún lugar de la capital. Su candidatura en las listas está más que cerrada porque ya ni José Manuel Franco, secretario de Estado y presidente del Consejo Superior de Deportes, ha dado la cara por ella. En el PSOE de Madrid quieren desprenderse de la presión de la vieja guardia socialista y ya bastante tienen con intentar hacer hueco a la sangre nueva que entra por la puerta. Mónica Silvana no solo se ha quedado sin apoyos internos, sino que además no tiene un hueco definido en todo el PSOE. La condena le ha golpeado fuerte a su imagen, pese a que ya estaba en el punto de mira por no dejar de preocuparse por su imagen especialmente en medios latinoamericanos.

Su cercanía a José Manuel Franco, conocida por todos en el PSOE, ya no le sirve de nada. Que consiguiera un puesto en las listas europeas dado su nivel de inglés fue un auténtico problema dentro del partido. Esos puestos están muy codiciados en el partido y Silvana, gracias a la intermediación de Franco, pudo hacerse con uno dejando atrás a muchos de la vieja guardia. Los vídeos de Silvana hablando en inglés circularon por los grupos de Whatsapp de los socialistas a la velocidad de la luz y muchos también se hicieron eco de la condena por acoso laboral a algunos de sus asesores en el Parlamento Europeo. Es la primera eurodiputada de la que se tiene constancia y la primera que ha saltado en los medios por este asunto.

Franco ya no tiene voz ni voto para dar alas a Mónica Silvana. Pero desde el PSOE de Alcalá de Henares y desde el PSOE de Madrid dejan claro a este medio que «no hay hueco» para una Mónica Silvana a la que le está costando encontrar hueco para reciclarse. Aún le quedan algunos coletazos en Bruselas dadas las longevas legislaturas, pero ya tiene que ir ahorrando dadas las circunstancias. Desde el entorno de la eurodiputada aseguran que está afectada por lo ocurrido y desesperada por encontrar la forma de reciclarse. Hay quien dice desde su mismo parlamento que incluso ha deslizado que esto pasará al olvido y encontrará hueco, pero ya no tiene padrinos a los que encomendarse, como sí hizo con Franco.

Mónica Silvana sigue defendiendo su inocencia respecto a esta condena y ha anunciado que la ha recurrido. Esto, como todo, llevará su tiempo y hará que todo este proceso se alargue. Ahora mismo, Silvana cree que sus galones como europarlamentaria podrían ser suficientes para aterrizar en Alcalá de Henares, pero ahí no la quieren bajo ningún concepto, tal y como aseguran fuentes del PSOE. Respecto a la Asamblea, lo último que le haría falta a Lobato en una candidatura complicada en la que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, amenaza con conseguir mayoría absoluta es a una dirigente tan preocupada por su imagen personal y que encima tiene una condena por acoso laboral a sus asesores.