En invierno, una de las partes de nuestro cuerpo que más tenemos que cuidar son los pies. Si cogen frío, es más probable que cojamos resfriados o hasta enfermedades más grandes. No importa si el resto está abrigado, los pies son los que regulan la temperatura. Teneros fríos es súper desagradable en cualquier situación, pero sobre todo cuando estás fuera de casa, ya que sabes que no puedes hacer nada para remediarlo y que se desarrolle alguna afección es prácticamente cuestión de tiempo. A continuación, te ofrecemos consejos para que esto no te vuelva a pasar nunca.
7Toma líquido suficiente para mantener los pies calientes
La web “Panter” propone que tomemos líquido suficiente para que los pies no queden húmedos. La falta de hidratación hace que el calor vaya desapareciendo del organismo. Ingerir alimentos como cayena, curry, canela, pimiento o alimentos con magnesio, calcio, vitaminas E, K y C ayuda a que la frecuencia cardíaca siga el ritmo que tiene que seguir y vaya hasta los pies correctamente. Así evitamos que se enfríen y mantenemos la temperatura que tenemos que tener.
