Siempre que vamos a un restaurante donde sirven carne, el camarero o la camarera nos pregunta si vamos a querer la carne hecha o poco hecha. Hay quienes prefieren tomar la carne poco hecha e incluso cruda porque consideran que está más buena o tienen ese punto de jugosidad que se pierde cuando está muy hecha. Según recoge la web “Consumer”, no es recomendable comer carne poco hecha y menos si la persona tiene un sistema inmune comprometido, es un niño o se trata de mujeres embarazadas.
2Una enfermedad leve que puedes tener sin darse cuenta al comer carne poco hecha

Se trata de una enfermedad leve que casi siempre no presenta síntomas, pero sí puede llegar a ser grave en mujeres embarazadas. Otro aspecto negativo de la carne poco hecha es que puede tener patógenos como Campylobacter, E.coli o Salmonella, esta última suele estar dentro de carne proveniente de aviar como pollo o pavo. Lo mejor siempre es comer carne que esté bien cocida antes que la cruda.