La Coca-Cola es una de las bebidas refrescantes más consumidas a nivel mundial, un refresco que compite con Pepsi y que incluso se utiliza para desatascar tuberías. Sin embargo, lo que muchas personas no saben es que se trata de una bebida que, tomada de forma abusiva, puede tener graves consecuencias en el cuerpo.
4OBESIDAD Y AUMENTO DE ACIDEZ DEL JUGO GÁSTRICO
La gran cantidad de azúcar que tiene la Coca-Cola puede provocar obesidad, sobre todo en aquellas personas que son propensas a ello. El jarabe de maíz que se emplea en estas bebidas y que tiene un alto contenido en fructosa, dificulta la absorción de agua en el sistema digestivo y perjudica al hígado. Además, provoca una mayor cantidad de picos de glucosa en la sangre que el azúcar habitual.
Por otro lado, su contenido en agua carbonatada provoca secreción gástrica y aumenta la acidez del jugo gástrico. Asimismo, su ácido fosfórico provoca la desmineralización ósea, ya que no permite la absorción apropiada de calcio en el organismo, debilitando los huesos e incrementando la posibilidad de fracturas. Asimismo, puede llegar a generar anemia.