La cerveza es la bebida por excelencia no ya en otros países, sino en España. Tanto, que incluso aunque luego tomes otra cosa, la frase «unas cervezas» o «tomar una cerveza» es sinónimo genérico de salir a tomar algo. Los que adoran esta bebida defienden contra los abstemios o amantes de otro tipo de bebidas las bondades de tomarte una cerveza, los beneficios para el cuerpo, sean o no con alcohol. Vamos a ver si es así o no conociendo lo que pasa en tu organismo si la bebes a diario, aunque sólo sea una.
La cerveza forma parte de nuestra cultura. Y es que es la bebida más popular, consumida por el 84% de la población española española, con independencia de su sexo o rango social. Sin embargo, a pesar de ser un elemento clave en las reuniones sociales, ya sean presenciales u online, durante la pandemia ha bajado considerablemente su consumo. Ahora, saliendo ya de ese túnel tan largo, no sólo ha recuperado terreno sino alcanzado picos de consumo. Y es que, al contrario que en otros países, en España asociamos la cerveza a la ingesta de alimento acompañado de amigos o familiares, es decir, de una bebida eminentemente social.
5Pero no todo es malo
Como casi con cualquier cosa en la vida, hay el lado bueno. Con la cerveza ocurre igual y seguro que los muy cerveceros se querrán quedar solo con las siguientes líneas. Veamos los beneficios de tomar una cerveza: según un estudio publicado en la revista Behavioral Brain Research, la cerveza contiene un tipo de flavonoide llamado xantohumol que podría mejorar nuestra función cognitiva y aumentar la capacidad intelectual. También contiene importantes cantidades de antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres. Beneficia también a los ojos, aunque a partir de tres cervezas, los beneficios se pierden.
Tras una caña, también disminuyen los niveles de azúcar en sangre, tiene efectos beneficiosos para el corazón gracias a las propiedades antiinflamatorias que contiene y también para tus riñones: así lo aseguraba una investigación publicada en American Journal of Epidemiology según la cual consumir una botella de cerveza al día reduce hasta en un 40% el riesgo de padecer los dolorosos cálculos renales.