Una de las carnes más apreciadas y más versátiles en la cocina es el solomillo de cerdo. Se trata de una pieza que puede dar muchísimo juego, ya que se puede cocinar asada entera, trocear para saltear, aderezar para preparar en brocheta, cortar en medallones, en filetes, y muchas opciones más con las que preparar una enorme variedad de recetas diferentes. Además, puede ser un ingrediente para resolver una comida rápida en cualquier día de la semana, cortado en filete y pasado vuelta y vuelta por la plancha. Pero también puede convertirse en un plato principal en una comida tan especial como la de Navidad o la cena de Nochevieja.
7SERVIR CON UNA GUARNICIÓN AL GUSTO
Transcurrido este tiempo de reposo lo cortamos en lonchas al gusto de cada cual, y lo disponemos en una bandeja previamente calentada para que mantenga la temperatura. Se puede servir con diferentes guarniciones, por ejemplo unas patatas asadas, unas setas recién salteadas, o una ensalada de varios tipos de lechuga. Se recomienda acompañar con un buen vino tinto, preferiblemente de tipo Pinot Noir, que es suave y ligero, perfecto para resaltar el sabor de la carne de cerdo.