Las vacaciones de invierno son ideales para hacer planes especiales y mágicos, porque no todo en la vida puede ser playa y sol. Refugiarse en una cabaña de madera en un lugar apartado es el sueño de muchas personas que necesitan de vez en cuando escapar del mundanal ruido y del estrés del día a día. Incluso es un plan ideal para esas personas que desean huir de todos los compromisos asociados a la Navidad y quieren aprovechar esos días de descanso de una forma diferente, lejos de luces y villancicos.
En España, el turismo rural está muy desarrollado, gracias a que nuestra geografía cuenta con preciosos parajes naturales y pueblos con mucho encanto para descubrir. Si lo que estás buscando es una cabañita acogedora donde tomar chocolate caliente mientras lees un buen libro, toma nota de estas propuestas.
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Estas cabañas son realmente especiales. Están en un tupido bosque precioso del pueblo de Zenauri, en Bilbao, y pueden presumir de ser las casas más altas de toda Europa, ya que están colgadas en grandes árboles a 17 metros de altura. Son de madera, perfectamente integradas en el bosque, y con grandes ventanales para disfrutar de un atardecer y un amanecer de lujo. Alguna de las cabañas tienen incluso una bañera dentro para una escapada romántica. También te puedes alojar en un peculiar carro cíngaro.