Un hábito del hogar que suele ser poco agradable para los usuarios es sacar la basura. Tan desagradable como necesario. Al igual que las casas generan deshechos diariamente, sucede lo mismo con nuestro cerebro. Si las sustancias consideradas “basura” por el cerebro no se limpian, se pueden acumular y derivar en daños graves. El sistema glinfático es el encargado de que esta zona de nuestro cuerpo se conserve de manera óptima. Igual que otras partes del cuerpo, puede deteriorarse con el tiempo y dar lugar a la aparición de alzhéimer.
3El sistema glinfático recoge la basura del cerebro
El resto de partes del cuerpo lo tienen mucho más fácil para deshechar aquello que se acumula. Tienen su propia gestión para la eliminación de deshechos que ya le gustaría tener a más de un dirigente. Estamos hablando del sistema linfático, una red de vasos, podríamos poner como ejemplo los vasos sanguíneos, que elimina todo aquello que las células no van a necesitar. La basura del cerebro se recoge con su alternativa al del resto del cuerpo: el sistema glinfático.