La salsa bechamel es una de las más sabrosas que se pueden utilizar en la cocina, razón por la cual se utiliza habitualmente en diferentes elaboraciones como croquetas, lasaña, canelones y otras muchas recetas.
En ellas se trata de uno de sus ingredientes básicos, pero para conseguir el mejor resultado hay que saber cómo elaborarla de la forma adecuada. Por este motivo, te enseñamos cómo hacer una bechamel que quede suave.
5PASOS FINALES DE LA BECHAMEL
Si quieres conseguir mejores resultados puedes tener la leche muy caliente en un cazo y vas añadiéndolo a la mezcla cacito a cacito, sin añadir más leche hasta que la masa la absorba. Siempre debe realizar removiendo continuamente, con movimientos circulares, de forma que la bechamel siempre esté moviéndose.
Cuando se haya añadido toda la leche, será el momento de probar y añadir sal, así como el toque de nuez moscado que es tan característico de esta salsa. En el caso de que prefieras optar por una bechamel con mayor espesor, tendrás que dedicar más tiempo y dejar que el líquido vaya progresivamente evaporándose mientras aparecen burbujas en la sartén.