La salsa bechamel es una de las más sabrosas que se pueden utilizar en la cocina, razón por la cual se utiliza habitualmente en diferentes elaboraciones como croquetas, lasaña, canelones y otras muchas recetas.
En ellas se trata de uno de sus ingredientes básicos, pero para conseguir el mejor resultado hay que saber cómo elaborarla de la forma adecuada. Por este motivo, te enseñamos cómo hacer una bechamel que quede suave.
3CÓMO HACER UNA SALSA BECHAMEL SUAVE Y SIN GRUMOS
Para hacer la salsa bechamel, se debe comenzar poniendo una sartén al fuego, añadiendo 50 gramos de mantequilla. En cuánto se funda, es el momento de añadir la misma cantidad de harina, para luego remover formando un pasta.
En el caso de que se quiera una bechamel más fina o más espesa es posible modificar esta proporción, aunque se recomienda mantenerla siempre; y con lo que se puede jugar para conseguir el resultado deseado es con la cantidad de leche y el tiempo de cocción/evaporación.