Para obtener el permiso de conducir, necesitamos pasar favorablemente un informe médico que verifique nuestro estado. La DGT es muy rigurosa con esto, también en el caso de las renovaciones. Tener el carnet es una gran responsabilidad como ciudadanos y dárselo a alguien que no está en sus plenas facultades puede ser un error fatal. La Dirección General de Tráfico tiene una lista de enfermedades que son incompatibles con la conducción. El usuario que las sufre, debe olvidarse definitivamente de su carnet de conducir.
3La DGT mira con lupa las enfermedades psiquiátricas
Según el tipo de enfermedad psiquiátrica, la DGT puede determinar que el conductor o la conductora no es apto para la conducción. Dentro de los que deben despedirse de su carnet, están los ciudadanos que presentan trastornos cognitivos, amnésicos o demencia. Según el grado de peligro que presente cada persona, el número de años para volver a coger el coche pueden variar. En la lista del organismo se recogen los siguientes padecimientos como serios: delirium, demencias, trastornos de ansiedad, trastornos catatónicos, trastornos de la personalidad, ansiedad y depresión, trastorno del sueño, trastorno obsesivo compulsivo, trastorno del desarrollo intelectual, hiperactividad, abuso de alcohol o drogas.