La Comunidad de Madrid no lo ha patentado aún, pero su presidenta se ha inventado un juego que sufren desde los consejeros de mayor renombre hasta los directores generales más desconocidos que ha disparado la tensión en Sol. El juego es sencillo y últimamente lo padecen solo David Pérez, consejero de Transportes, y Enrique López, consejero de Presidencia, Interior y Justicia; aunque ha habido otros altos y medios cargos que saben de qué va este “divertimento” de la presidenta de la Comunidad de Madrid. A Isabel Díaz Ayuso le gusta retirar la palabra a gente al azar que, por supuesto, está bajo su mando. Fuentes solventes de Sol insisten en que es común que de un día para otro un consejero vea que incluso está bloqueado en el WhatsApp. Quien lo sufre ahora es Enrique López, quien se ve obligado a coincidir en más de un acto con la presidenta de la Comunidad de Madrid y quien ve que no solo no le dirige la palabra, sino que ni siquiera le mira pese a sentarse al lado. A algunos les divierte, pero a otros les tensa.
El juego aún no tiene nombre, pero es una mezcla del juego de la botella con verdad y atrevimiento mezclado con ciertos juegos psicológicos. Las fuentes de la Comunidad de Madrid recuerdan incluso a alguna que otra asesora entrar en una dinámica de desesperación absoluta al ver que de un día para otro no solo no podía hablar con la presidenta de la Comunidad de Madrid, sino que tampoco podía hablar con ella vía WhatsApp. Quien lo sufre ahora es el consejero de Presidencia, pero hay otros consejeros que han pasado por este proceso; empezando por David Pérez y pasando por Enrique Ruiz-Escudero, consejero de Sanidad, y Carlos Izquierdo, consejero de Administración Local y Digitalización.Y como ellos, también lo han sufrido sus propios directores generales; al menos los que gozaban de la confianza de quienes apoyaron a Pablo Casado en la guerra interna del Partido Popular.
El “juego de Isabel” solo le divierte a ella. En la Comunidad de Madrid hay cierto pánico a que seas el próximo que señale la botella. Lo que cuentan las fuentes solventes de Sol es que no es necesario que hayas hecho nada, como sí que lo hicieron Enrique López, David Pérez, Enrique Ruiz-Escudero o Carlos Izquierdo. Te puede tocar la “china” sin que lo hayas pedido necesariamente y nunca sabrás por qué. La buena noticia es que con la misma espontaneidad con la que te bloquea, te desbloquea. Y la otra buena noticia es que el hecho de que seas señalado por el rodillo de Isabel Díaz Ayuso no significa que hayas hecho nada malo. A veces es solo porque sí, tal y como detallan fuentes de Sol. El caso de los consejeros es sensiblemente distinto, pero lo cierto es que han caído más de uno y más de dos sin entender por qué. Incluso el propio Miguel Ángel Rodríguez, director de gabinete de la presidenta de la Comunidad de Madrid, ha sido víctima de algún que otro arrebato de la líder popular.
Una de las pocas que ha esquivado el juego de Isabel y de las pocas que no ha sido víctima de estos bloqueos instantáneos ha sido la consejera de Medio Ambiente, Paloma Martín. Su inspiración para las entrevistas de trabajo en PricewaterhouseCoopers y su pasión por la psicología dentro del ambiente de trabajo puede haberle llevado a no ser víctima de los juegos de Isabel. Pero lo cierto es que el pánico se respira en cada pasillo de Sol porque nadie sabe quién será la próxima víctima. Los consejeros están acostumbrados, pero como consiga la mayoría absoluta en mayo, algunos creen que irá a más.