Chen es el mayor admirador de Francisco Franco en la Comunidad de Madrid. El hostelero asiático, que vive al sur de Manzanares, ahora es conocido como el «chino facha» y es que su admiración llega a límites insospechados. Pero, ¿Quién es el chino franquista?
Vamos a conocer a continuación quién es el chino franquista y por qué se le conoce con ese sobrenombre.
EL BAR OLIVA, UN SANTUARIO DEDICADO AL DICTADOR
Hace nueve años, en el barrio de Usera, Chen decidió abrir un santuario dedicado al Caudillo llamado «El Bar Oliva«. Este bar está situado en un sitio estratégico por la afluencia de camiones, por lo que reciben de forma diaria a mucha gente.
El bar se puede reconocer desde lejos por dos banderas de España y las franjas rojigualdas que adornan la fachada del local de Usera. La clientela, por norma general, solo se acerca al bar para desayunar o para tomar café, muy pocos de ellos se acercan a la hora de comer para degustar el menú, a pesar de que algunos admiten que Chen no cocina del todo mal.
Con cada caña, la familia de Chen sirve una pequeña tapa de queso manchego o de jamón ibérico. Además, el menú que ponen cada día es comida cien por cien española. Se han adaptado a la perfección a la cultura y a la gastronomía de nuestro país.
MONTÓ EL BAR POR LA CLIENTELA MAYOR
Desde que Chen llegó a España hace más de quince años, se ha dedicado a la hostelería. Fueron sus clientes más ancianos los que le hablaron del dictador Franco. Señoras de ochenta años que le contaron miles de anécdotas. Y le gustaron tanto que decidió abrir el santuario.
Chen no duda en saludar con el brazo en alto mientras grita eso de «¡Viva Franco!». Regala a sus clientes calendarios con la imagen de Franco y asegura que ha leído mucho sobre la historia del dictador.
El chino franquista admite que «Llegué de un país comunista en el que, pese al siglo XXI, la gente no puede hablar. ¡. Yo sé lo que es el comunismo, vosotros no lo habéis visto», resume
CHEN CRITICA A LOS POLÍTICOS
El hostelero defiende tanto a Franco que no duda en criticar a los políticos que están en el poder actualmente: «Hoy en día ningún político tiene huevos para hacer nada. Cuando dicen algo nunca lo cumplen. Franco al menos lo que quería hacer lo hizo, es el único que tuvo huevos. Hoy los políticos solo piensan en ellos, en llenar sus bolsillos, estén ahí cuatro u ocho años», ha contado.
Pero el camarero no ha acabado ahí, sino que ha seguido criticando al sector de la política actual y ha defendido la situación que se vivía durante el franquismo, a pesar de no haberla vivido.
«La gente dice que antes no había libertad y demás. Pues claro que no había. ¿Pero qué país tenía la libertad que tenemos ahora? Son épocas distintas. También Franco habría hecho mucho más ahora que hace 50 años. En su época hizo pantanos, creó la sanidad, la jubilación, dejó el país sin deuda… La gente, cuando se lo explicas, lo entiende. En cambio hoy en España lo estamos pasando muy mal. Los políticos solo piensan en robar y los que trabajan pagan muchos impuestos. ¿Y quién disfruta en la sociedad? Los vagos, los yonquis, los borrachos, que no hacen nada y reciben todas las ayudas», ha concluido el dueño del «El Bar Oliva».
EL FRANQUISMO Y EL COMUNISMO CHINO
No son pocos los que le sugieren a Chen que, si Franco estuviese en el poder, él sería enviado de inmediato a su país de vuelta. Pero ante esto, el hostelero tiene siempre una contestación preparada:
«Franco no quería extranjeros para que no sacaran información al exterior. Ni China los quería tampoco. Yo no sé lo que haría Mussolini u otro por ahí, pero sé que los gobiernos de derecha son mejor que los de izquierda. Mao Zedong por ejemplo mató a siete de los diez capitanes que le ayudaron a conseguir el poder. Franco no hizo eso. Vale, Franco se quedó con todo el dinero de la República, pero no les quitó las casas a sus familias. Mao lo robó todo y encimA echó a todo el mundo a la calle. Los mandó a cavar huertos al campo».
Además, admite que el Valle de los Caídos es su monumento favorito y que no deben cerrarlo. «Pues que primero tiren abajo la Alhambra, que la hicieron los moros cuando conquistaron España», ha terminado diciendo.
LLAMA A SU HIJO FRANCO CHEN
Tanto es su aprecio por el Caudillo que el chino franquista ha decidido ponerle a su bebé el nombre de Franco. Así, su bebé de apenas nueve meses se llama Franco Chen y, según dice, es todo un homenaje. «Quiero que mi hijo haga algo importante, como hizo Franco para mejorar España».
Además, no duda en reconocer a su hijo como el «futuro Caudillo de España», algo que le provoca risa tanto a él como a su clientela fija que siempre acude a tomar el café de la mañana.