Los exámenes de oposición de los inspectores de Hacienda cada vez son más fáciles. El Gobierno está reduciendo el nivel de exigencia de estas pruebas hasta el punto de que la dificultad de las oposiciones que se están preparando para este año son mucho más fáciles que las que se llevaron a cabo en el año 2019. Desde un examen teórico con la mitad de temas, las preguntas mal contestadas no penalizan y hasta dos pruebas han desaparecido del examen para conseguir una plaza como inspector de Hacienda. Estos son algunos de los cambios que se pretenden introducir en el examen que se llegará a cabo este año con respecto al de 2019, cuando el nivel de exigencia era muy superior. De esta forma, el Gobierno y en concreto la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quiere que los nuevos inspectores de su departamentos «mucho» menos preparados.
Este año 2022 se ha llegado a un acuerdo sobre las pruebas de promoción interna del personal del departamento de Hacienda que capitanea María Jesús Montero. Sin embargo, este documento dista mucho de las últimas pruebas que se llevaron a cabo, en el año 2019. Ahora, tanto el temario como los exámenes y hasta el número de pruebas ha cambiado. Pero, lo que sorprende no es que se hayan introducido cambios en estas pruebas de oposición, sino que el nivel de exigencia de estos procesos se ha reducido considerablemente. La titular de Hacienda y Función Pública quieren que sus nuevo inspectores estén «mucho» menos preparados a partir de ahora.
En primer lugar, en el examen de 2019 había 83 temas, de los cuales 38 eran de materias comunes, y 45 temas específicos a elegir entre tres opciones: derecho constitucional y administrativo; economía y administración financiera; y recursos humanos. Por el contrario, en el acuerdo de 2022 solo se contemplan 16 temas. Es decir, que el número de temas se ha reducir mucho más de la mitad. Respecto a los test, en del año 2019 constaba de 50 preguntas con cuatro respuestas alternativas y con penalización en las respuestas erróneas. En el actual, habrá 80 preguntas con tres respuestas alternativas y sin penalización en las contestaciones incorrectas. Una cuestión que no deja de sorprender, dado que supone un cambio abismal entre la oposición de 2019 y la actual. Aunque estos no son los únicos cambios que se han introducido.
Además del examen, en el año 2019 había tres ejercicios más. Tras el test se llevaba a cabo una exposición oral de tres temas del programa, dos de ellos del temario especifico y uno del común a elegir entre dos extraídos al azar. La tercera prueba era la realización de un supuesto práctico, consistente en la elaboración de un instrumento jurídico que resuelva un problema y lectura ante el tribunal con preguntas sobre el ejercicio. Por último, el cuarto ejercicio era un examen de idiomas a elegir entre inglés, francés o alemán, el cual consistía en una redacción, comprensión lectora y conversación. Sin embargo, en el proceso del 2022 ninguna de estas tres pruebas formarán parte de la oposición, es decir, que han quedado eliminadas. Lo único que se mantendrá exactamente igual es el concurso de méritos y el curso selectivo.
Se trata de unas modificaciones que no ha dudado en denunciar el diputado del Grupo Mixto, Pablo Cambronero. Este político ha compartido a través de cuenta de Twitter el acuerdo alcanzando entre la Dirección General de la Función Pública, que capitanea Inés Pérz Fernández, y los sindicatos de CSIF, UGT y CCOO. Se trata de un documento para la fleibilización en las pruebas de promoción interna. Las cuales, como se ha detallado arriba, distan mucho de las que había en el año 2019. Por este motivo, Pablo Cambronero ha soliticado conocer los motivos que han llevado a tomar esta decisión. Así como si los errores que cometan estas personas (como consecuencia de su menor preparación) serán subsanados de oficio sin que el contribuyente tenga que reclamar. Y, en última instancia, ha preguntado por qué no se premia el esfuerzo del candidato e lugar de crear un proceso menos exigente y si se va a hacer caso al comunicado enviado por la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado, quienes han denunciado esta situación.
Desde la Asociación de Inspectores de Hacienda han destacado que estas modificaciones supondrán un destrozo de la Administración Pública y la «muerte» de una función pública «altamente cualificada, independiente y profesional». Esta asociación ha destacado en un comunicado que ha remitido a la ministra de Hacienda y Función Pública, a la secretaria de Estado de Función Pública, al secretario de Estado de Hacienda y a la directora general de la AEAT cuatro cartas sobre estos cambios. Estas misivas se centran en varios puntos, la falta de diálogo y unilateraildad, la falta de atenciñon a la petición de participación por en el proceso, el incumplimiento de los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad Y la falta de transparencia que deriva de los futuros criterios de selección de contenidos en el acuerdo. Así como la rebaja del nivel de preparación técnica, entre otras cuestiones.