Una de las obsesiones de nuestro tiempo es la lucha contra el azúcar, aunque por otro lado no podemos evitar ser adictos a él. Así, estamos en continua contradicción y crisis, tira y afloja, echando mano de edulcorantes para no sentirnos tan mal. Pero es una obsesión que, a la luz de la ciencia es cada vez más justificable. Y es que parece uno de los grandes enemigos de la salud, fuente de muchos males. Eso lo sabe también el marketing, que inunda todo con productos bajos en azúcar y con múltiples opciones de edulcorantes sustitutivos. Veamos por qué no son tampoco la solución.
5LOS SUSTITUTOS NATURALES AL EDULCORANTES Y AZÚCAR
Como siempre, lo natural es la respuesta y hay opciones de llevar una vida dulce sin tener que recurrir al azúcar y edulcorantes. Como muchos especialistas señalan, al final es una adicción que podemos irnos quitando poco a poco. Por ello que las respuesta sobre nuestro organismo no es de hambre, sino de necesidad de más, de ahí esa sensación a veces de descontrol y de que podrías tomarte diez donuts seguidos o una tarta entera con el estómago lleno.
Veamos de todas formas las opciones, si no quieres prescindir de lo dulce pero tampoco renunciar a lo sano.