El patrullero de altura “Infanta Elena” finalizó su última patrulla de vigilancia y seguridad marítima, donde además participó en el desarrollo de la regata “Sail GP” en Cádiz, tras una larga carrera al servicio de la Armada española.
En este crucero de despedida, iniciado en septiembre, en el que patrulló por el Mediterráneo y del Atlántico ha recalado en los puertos de Cádiz, Palma y Alicante, donde pudo ser visitado por diferentes autoridades y al público en general mediante jornadas de puertas abiertas.
Después de casi 43 años de servicio, el “Infanta Elena” que arribó el pasado 3 de octubre por última vez a su puerto base del Arsenal de Cartagena, ha recorrido desde su entrega a la Armada más de 730.000 millas y completado 4.200 días de mar. Asimismo, participó en diferentes despliegues operativos y misiones internacionales, como la operación Atalanta, contra la piratería en Somalia, la lucha contra la delincuencia en el golfo de Guinea, la guerra del Golfo y la operación de recuperación de Perejil tras la invasión marroquí en 2002.
El “Infanta Elena”, que es el tercero de los navíos de la clase “Descubierta”, fue botado por parte de la entonces Empresa Nacional Bazán (hoy Navantia) el 14 de septiembre de 1976 en su factoría de Cartagena (Murcia), aunque por la falta endémica de recursos económicos para Defensa no sería entregado a la Armada hasta el 12 de abril de 1980.
Construida como corbeta, luciendo en ese época el numeral de casco F-33 de fragata, en ese rol de navío de escolta sería especialmente eficaz, como sus 8 hermanas de la clase Descubierta, dado que a pesar de su relativamente pequeño tamaño, desplaza 1.640 toneladas y tiene 88,9 metros de eslora (largo), eran/son muy marineras y estaban muy bien dotadas. Es de destacar que contaban con un espectacular armamento de todo tipo, incluidos misiles antiaéreos Sea Sparrow y antibuque RGM-84 Harpoon; y un completo sistema antisubmarino, que constaba de un mortero doble Bofors de cohetes antisubmarinos de 375 mm y dos tubos lanzatorpedos triples Mark 32 Surface Vessel Torpedo Tubes (SVTT) de 325 mm.
Todas las Descubierta de la Armada, en total 6, ya que dos fueron vendidas a Egipto y otra a Marruecos, participaron en la guerra del Golfo de 1990/1991, ganando con su actuación el sobrenombre de “hormigas atómicas”, en referencia a unos populares dibujos animados de la época. Posteriormente, a principios del actual siglo, ante la incorporación a la Armada de navíos de escolta más modernos, fue reconvertida en patrullero de altura, reincorporándose a la Armada el 13 de enero de 2004 tras finalizar las obras de remodelación, luciendo en su casco el numeral de costado P-76.
Ya en esta etapa, siempre basada en Cartagena, sus principales misiones han sido la de seguridad marítima, la lucha contra la contaminación marítima, la detección y seguimiento de posibles actividades de inmigración ilegal y la colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la lucha contra el terrorismo y narcotráfico.
El último Comandante del buque es el capitán de corbeta Narciso Donoso Alonso que contaba con una dotación 80 personas, que ahora quedará al mínimo al pasar a la situación de baja disponibilidad en los muelles del Arsenal de Cartagena, a la espera de su destino, que posiblemente será la baja. Mientras se retirarán todos los elementos útiles para la Armada, incluido su actual armamento, compuesto por: los citados lanzadores de misiles RGM-84, un cañón Oto Melara (hoy Leonardo) de 76 mm/62 compact, un vetusto cañón Oerlikon 20mm/120, dos ametralladoras Browning M2 de 12,7 mm y otras tantas de 7´62 mm, siendo la fase final su subasta para su desguace.
Tras la inmovilización de la “Infanta Elena” solo queda al servicio de la Armada su “hermana” de clase, la “Infanta Cristina”, que está previsto siga el mismo destino el próximo año, también tras portar la bandera de España durante 43 años. Sin embargo el magnífico diseño español, continua en servicio en Egipto (corbetas “El Suez” y “Abou Quir”), como se ve ha visto en fotos recientes realizando ejercicios conjuntos con la Marina Militar de Estados Unidos o US Navy. Respecto a la corbeta vendida a Marruecos y entregada en marzo de 1983 a su Real Marina, la bautizada como “Teniente Coronel Errahmani” (F-501), no se tiene constancia de sus status operacional, de hecho lleva mucho tiempo sin verse fotos del navío, por lo que posiblemente estaría en reserva en la principal base naval de esta marina magrebí, que es la de Casablanca.