Es inevitable que cuando un medio publica recetas, muchas veces apueste por platos elaborados propios de ocasiones especiales, y capaces de sorprender a propios y extraños. Pero para ser del todo sincero, la mayoría de las veces son las alternativas más clásicas y sencillas las que más se utilizan, sobre todo en el día a día. Es lo que sucede con los guisantes con jamón, un primer plato o una cena realmente rica, sana y fácil de cocinar.
Pero aunque se trate de un plato que mucha gente conoce, siempre hay trucos que pueden hacer que sea todavía más destacable. En las próximas líneas te contamos todos para que causes sensación entre tu familia y amigos.
4¿Cómo cocer unos huevos para que queden blanditos?
Darle punto exacto a unos huevos cocidos para que queden blandos por dentro y hechos por fuera puede parecer fácil, pero no lo es. El truco está en el tiempo. Pero cuando decimos el tiempo lo decimos de verdad. Es cuestión de segundos que el huevo quede demasiado blando o demasiado hecho.
La medida es la siguiente: cuatro minutos, contando desde que el agua empieza a cocer en la cazuela en la que lo hagamos. Si hay que coger el reloj para no pasarse ni unos segundos, pues se hace. Luego, al sacarlos, conviene ponerlos en agua fría y pelarlos rápido. De lo contrario, se terminarán haciendo poco a poco por ellos mismos.