Es eurodiputado, pero es uno de los aristogatos que ha propiciado la salida de Macarena Olona. Este dirigente es vicepresidente primero Acción Política de Vox, jefe delegación de la formación en el Parlamento Europeo y además abogado del Estado. Pero sobretodo es el némesis que provocó junto a Javier Ortega Smith la salida de Macarena Olona. La exdiputada hizo muchos amigos, pero los pocos enemigos que hizo en la formación se tomaron muy en serio la idea de echarla del partido a toda costa. El papel de Ortega Smith es conocido por todos, pero pocos conocen el lobby que hizo Buxadé para echar a la parlamentaria lo antes posible. Cuando Iván Espinosa de los Monteros tomó la decisión de mandar a Olona a Andalucía, pocos vieron que quienes estaban detrás de esta idea eran también Buxadé y Ortega Smith.
Buxadé mantiene un perfil relativamente discreto en el partido, al menos de puertas hacia afuera. Sin embargo, su peso a la hora de provocar intrigas dentro de Vox ha quedado más que demostrado cuando se tiene en cuenta la situación personal de Macarena Olona. Desde el partido intentan mantener la discreción, pero cada vez cuesta más porque las amenazas internas entre Olona y los dirigentes del partido han convertido en un polvorín a punto de explotar. Macarena Olona trabaja en cómo montar su próxima formación política a golpe de comidas con antiguos pesos pesados del Partido Popular mientras que en Vox buscan el modo de utilizar las redes sociales para echar de una patada a la excandidata de la carrera política.
Jorge Buxadé es uno de los principales instigadores de la salida de Macarena Olona. Fuentes de Vox detallan que su mala relación con el eurodiputado ha sido clave y una losa más que se sumaba al choque constante entre Olona y Ortega Smith. La salida de la exdiputada de Vox del partido tuvo mucho que ver con los constantes comentarios negativos que lanzaban estos dos tenores dentro del partido. Iván Espinosa de los Monteros siempre atendió a los intereses de la formación conservadora y Santiago Abascal siempre quiso evitar todo tipo de problemas en las reuniones. Por tanto, el envío de Olona a Andalucía tuvo mucho que ver con el malestar que propiciaron, según detallan fuentes de Vox, tanto Buxadé como Javier Ortega Smith, la alianza que acabó con la proyección de Olona.
El tándem de Javier Ortega Smith Jorge Buxadé no ha estado muy mal visto dentro de Vox. Santiago Abascal e Iván Espinosa de los Monteros lo permitieron desde el principio pese a que eran conscientes de la mala relación que se estaba gestando dentro de Vox. El resultado final fue que Macarena Olona acabó en una posición aislada y lo suficientemente delicada como para abandonar el partido por la puerta de atrás tras la derrota en Andalucía.
La mala relación entre Ortega Smith y Macarena Olona no es nueva para nada. De hecho, que Ortega Smith se lleve mal con algunas integrantes del partido no es algo nuevo. Rocío Monasterio es la primera que ha dejado claro que no soporta al concejal de Madrid, pero independientemente de lo que piense es una realidad que se ha dejado ver en más de un acto público. Como la relación de Ortega Smith con Rocío Monasterio, también Jorge Buxadé ha sido destacado por fuentes de Vox como un vector de discordia en el partido que ha generado malestares innecesarios. Lo que no se sabía era que Buxadé era el primero que había instigado la salida de Olona del partido.
LA GUERRA INTERNA SE RECRUDECE
Vox quería fuera a Macarena Olona. La mala relación entre Javier Ortega Smith y la diputada fue un punto de partida, pero la decisión de Iván Espinosa de los Monteros de mandarla para Andalucía fue una declaración de intenciones. Ahora, el problema es que lo que debía haber sido una salida silenciosa del partido se ha convertido en una guerra de puñaladas oculta que amenaza con erosionar Vox desde dentro. Macarena Olona sopesa ya montar su propio partido y otras vías de volver a la política, pero desde el entorno de la excandidata de Vox a Andalucía deslizan que la formación está «jugando sucio» por las redes sociales y con la filtración de información para anular todo lo que Olona pueda hacer. Si monta una formación por su cuenta, Vox corre el riesgo de perder un buen mordisco de votos. El miedo que se respira en Vox ahora es que Olona se ponga a hacer lo propio y airee asuntos internos que afearían a los «aristogatos» de la formación.
Olona era uno de los principales activos de Vox, le problema para Santiago Abascal es que era un verso libre que no tenía ningún problema en tener su propia hoja de ruta. La idea de mandarla a Andalucía no gustó a la diputada. Sin embargo, su lealtad a las siglas hizo que se fuera sin rechistar. El problema, que se convirtió después en una oportunidad para Vox, fue que Macarena Olona perdió esas elecciones dadas las expectativas que manejaba el partido de extrema derecha. Tras esto llegó la salida que todos conocemos y la posterior vuelta de Olona. Sin embargo, el «no» de Abascal a la vuelta de Macarena ha dejado claro que hay una guerra abierta entre el partido y la exdiputada que pretendían que pasase completamente desapercibida.
