Madrid es una ciudad apasionante, pero en ocasiones puede ser asfixiante. La gente siempre va con prisa y casi siempre encuentras lugares atestados de gente. Cada tanto, los ciudadanos de la capital buscan lugares cercanos donde poder relajarse y volver a conectar con ellos. Un espacio donde dejen de escuchar el ruido de los coches y reflexionar sobre las cosas verdaderamente importantes. Ese lugar es Torrelaguna, una villa madrileña declarada Conjunto Histórico Artístico y que queda solo a 50 kilómetros de la capital. ¡En medio de Sierra Norte!
7Los ciudadanos de Madrid flipan con las casas del pueblo
El pueblo en general tiene las típicas fachadas de casas antiguas que encantan a todos. En la calle del Cardenal Cisneros hay varias edificaciones que fueron palacios en el siglo XVI. Si quieres sentirte como si estuvieras en un cuento de hadas o realizar una producción cinematográfica de época, Torrelaguna es un lugar predilecto para ello. Cada parte del pueblo tiene miles de historias para contar, así como su gente. Lleva una cámara de fotos o teléfono de móvil con batería a tope porque querrás sacar fotos de todo. Sin duda, Torrelaguna es un antes y un después en los amantes del turismo. Nadie vuelve a Madrid siendo el mismo.
