Preparar marisco en casa es una auténtica delicia. Más aún si se trata de unos riquísimos gambones a la plancha. Pero, como suele suceder en estos casos, existe un inconveniente: el olor que suele ocasionar hacer este tipo de alimentos. Algo que provoca que no solo la cocina termine oliendo a gamba, sino también buena parte de la casa… y por bastante tiempo.
Por suerte, hay una manera de no dejar de disfrutar de este plato, sin tener que gastarse el dinero en una marisquería, y evitar los malos olores. Te la contamos en profundidad.
5¿Cómo preparar unos gambones a la plancha en el horno?
A la vez que el horno se calienta, simplemente hay que coger una bandeja típica para este electrodoméstico y forrarla con papel de aluminio. De esta forma también será más cómodo después limpiarla.
Acto seguido se echa generosamente sal gorda en el fondo de la bandeja, y después se colocan los gambones encima. Antes de meterlo en el horno se pone un poco más de sal por encima del propio marisco. Pasarse no suele ser un problema.