Preparar marisco en casa es una auténtica delicia. Más aún si se trata de unos riquísimos gambones a la plancha. Pero, como suele suceder en estos casos, existe un inconveniente: el olor que suele ocasionar hacer este tipo de alimentos. Algo que provoca que no solo la cocina termine oliendo a gamba, sino también buena parte de la casa… y por bastante tiempo.
Por suerte, hay una manera de no dejar de disfrutar de este plato, sin tener que gastarse el dinero en una marisquería, y evitar los malos olores. Te la contamos en profundidad.
4Preparar el horno
El primer paso para hacer los gambones en el horno es preparar este último. En realidad no tiene ningún misterio. En lugar de hacer lo acostumbrado de poner una sartén en el fuego, hay que poner a calentar el horno a 180 grados, y esperar a que este coja el calor suficiente.
Mientras tanto, se puede ahorrar tiempo preparando la bandeja con los gambones.
