El guacamole casero es una de las mejores opciones que puedes incorporar dentro de tus recetas culinarias. Una apuesta asegura para aquellos días en los que viene visita a casa y quieres dejar anonadados. Resulta que el guacamole ya había conquistado al mundo entero antes de que saliera a la luz la exquisita gastronomía mexicana. Se adelantó al movimiento tex-mex y la obsesión evidente que presentan muchos millenials ante la presencia del aguacuate en las comidas. Es cierto que puedes encontrar guacamole hecho en el Mercadona o en cualquier supermercado, pero si quieres marcar la diferencia, hacerlo en casa no tiene comparación alguna.
4Guacamole casero: cómo se hace
Pica la cebolla fina y haz lo mismo con los chiles jalapeño que vas a usar. Escalda el tomate en agua ya hirviendo entre 20 y 30 segundos. Después, refrescalo con agua helada para cortar la cocción. Pelalo y corta por la mitad, retira las semillas y pica la carne en dados pequeños. Después de lavar y secar el cilantro, pícalo, no lo machaques demasiado, haz que el corte sea limpio deslizando el filo. Corta la lima en 2 mitades y exprime el jugo. Guarda lo que te sobre para otra oportunidad.
Corta los aguacates, también en partes y quita los huesos. Saca su carne y ponlos en un cuenco grande, para machacarlo, esta vez sí, con un tenedor o utensilio propicio para ello. Hecho esto, se unen todos los ingredientes que, previamente, se habían preparado por separado y sazonando a gusto. Lo más común es servirlo junto a nachos.
