¿Quién no se ha sentado un domingo con la familia y en el centro de la mesa había una cazuela con albóndigas recién hechas por tu abuela? Las albóndigas son uno de esos platos que nos recuerda a la infancia, a la comida de antaño y las comilonas que nos pegamos por comer cantidades ingentes que nos ponían nuestros abuelos cuando nos veían que teníamos el plato vacío. Por ello, te vamos a enseñar esta receta maestra del Gipsy Chef para tener unas aromáticas y jugosas albóndigas en tan solo diez minutos que te harán vibrar.
2Primer paso: cortar la cebolla
Para empezar esta elaboración tenemos que coger nuestra cebolla, que sea de un tamaño medio o dos pequeñas, y la cortamos en juliana con un grosor de aproximadamente un milímetro. Si quieres quitar el picor característico de la cebolla pueden sumergir los trozos en agua con hielo durante unos 30 minutos, esto hará que suavice el sabor del vegetal y que puedan comerlos los más intolerantes al picante.