La gastronomía española está repleta de productos deliciosos. Hay cientos de platos típicos que son un éxito, como la paella o el cocido. También están las recetas más ‘gourmet’ para fechas señaladas. Pero al final se tiende a recurrir a lo mismo: pasta, legumbres… Casi siempre platos que no son nada caros y que tienden a gustar a todo el mundo. Sin embargo, existen recetas sencillas que se salen fuera de lo común y que se preparan en poco tiempo. Los pimientos de piquillo rellenos de bacalao son el mejor ejemplo.
3COCER EL BACALAO
Lo primero es cocer el bacalao. Para ello es importante que previamente esté limpio, sin piel y sin ninguna espina (se puede comprar así directamente). Esto es clave, puesto que el bacalao va a ser el relleno y no debe haber nada que estropee el bocado. Después lo desmigaremos en pequeños trozos. Por otro lado pondremos agua en una cazuela e introduciremos el pescado. Una vez empiece a hervir el agua, será el momento de apagar el fuego, sacar el bacalao, escurrirlo con ayuda de un colador y reservarlo. El pescado debe cocinarse poco, ya que después irá también al horno, por lo que es decisivo que en cuanto empiece a hervir se reserve. Ahora vamos con lo más importante: los pimientos de piquillo.