Por los realities televisivos pasan todo tipo de personajes, desde los famosos con más caché y celebrities de segunda, hasta personas anónimas con ganas de conseguir algo de fama y con un pasado turbulento. Hace poco salía a la luz el escándalo de uno de los participantes de la segunda edición de ‘La Isla de las tentaciones’, Carlos, al ser detenido por un presunto abuso sexual en grupo a una joven durante una fiesta. El caso del ex finalista de Supervivientes no llega a tal extremo, pero sí tiene una trayectoria llena de delitos y visitas a los juzgados, que podía haber terminado muy mal su no fuese porque fue capaz de reconducir sus pasos y encontrar un futuro mejor. Ahora él mismo ha decidido contarlo todo con pelos y señales.
2UNA ADOLESCENCIA MUY COMPLICADA
La infancia de Albert no fue fácil y la adolescencia aún se volvió más complicada. A los 15 años comenzó a rodearse de malas compañías y a vivir una serie de conflictos callejeros que fueron llevándole por mal camino y estuvo dando tumbos, entrando y saliendo de los juzgados, hasta los 18 años. Cuando lo recuerda aún le sorprende no haber pasado ni un día en el calabozo, ya que en su entorno era lo normal y lo natural acabar preso en alguna ocasión. Reconoce que de los catorce colegas de su pandilla, once recibieron alguna pena de cárcel. Admite que se equivocó muchísimo en la adolescencia, dejándose arrastrar por gente que cometía delitos, y que estuvo pagando juicios hasta que cumplió los 22 años.