A todos nos ha pasado que nos encontramos en una situación peculiar donde queremos enfriar una bebida, especialmente la cerveza, y no podemos porque no hay hielo, nevera o congelador. Os enseñamos ciertos trucos para poder hacer este proceso sin la necesidad de usar todo esto.
4Otra alternativa algo menos útil
Si nos vemos en una situación muy extrema o en un apuro, podemos emplear el mismo sistema de enfriamiento evaporativo, pero a menor escala. Para ello, debemos remojar una toalla, un periódico o papel higiénico con agua fría, y luego envolverlo en la cerveza. A poco que el agua se vaya enfriando, el líquido empezará a enfriarse lentamente.