La jefa de planificación de políticas de la Oficina del Secretario General de la OTAN, Benedetta Berti, ha afirmado que es «impredecible» prever una escalada o no en la guerra de Ucrania. Ha añadido también, en un desayuno informativo en Barcelona organizado por Cidob, que el objetivo de la alianza es la defensa de sus aliados.
Este evento se ha celebrado justo después de la cumbre de la OTAN de esta semana en Madrid, Berti ha sostenido que ha habido una «retórica temeraria» por parte de Rusia, algo que ha avisado que no contribuye a la estabilidad.
Berti, que ha sido una de las negociadoras y redactoras del nuevo concepto estratégico de la OTAN, ha calificado de histórica y transformadora la cumbre celebrada en Madrid, porque se han tomado decisiones que «han marcado una transición» y han estado influenciadas por la invasión rusa en Ucrania.
Ha destacado el contraste entre el último concepto estratégico que había aprobado la alianza del atlántico norte, en el que se podía hablar de paz, con el aprobado esta semana en Madrid, que recoge que actualmente no se puede «garantizar estabilidad» en la región, debido a la invasión rusa de Ucrania.
También ha puesto de relieve que, además del elemento militar en la guerra en Ucrania, se debe tener en cuenta la dependencia energética de Rusia y en otros ámbitos como el político, económico y tecnológico, así como el papel de China en el contexto actual.
VÍAS DIPLOMÁTICAS
Sobre si hay vías diplomáticas abiertas con Rusia para poner fin a la guerra en Ucrania, Berti ha explicado que antes del conflicto había vías de cooperación abiertas, pero eso cambió cuando «Rusia cambió su comportamiento», por lo que se han enfriado las relaciones con el Kremlin.
También ha asegurado la OTAN que quiere seguir con los canales de comunicación abiertos, pero hay peticiones rusas que no pueden abordar, como la petición de que no haya alianza con nuevos países porque eso «incomoda a Rusia.
Berti ha expuesto lo aprobado en el nuevo concepto estratégico y ha destacado que la OTAN está poniendo el foco en sus socios, en concreto Finlandia y Suecia, que serán los próximos países en entrar en el tratado del atlántico norte.
También ha explicado que en la cumbre de Madrid se ha decidido acelerar la innovación tecnológica en defensa, tener en cuenta los efectos de las políticas de seguridad en el cambio climático y realizar un seguimiento de las emisiones que produce la defensa.
TERRORISMO Y SAHEL
Preguntada por el posicionamiento de la Alianza sobre el terrorismo en el nuevo concepto estratégico, la jefa de planificación de políticas de la Oficina del Secretario General de la OTAN ha afirmado que no ha habido una «gran revolución en la diagnosis» sobre cómo abordar este problema, y ha añadido que va a haber más asistencia en seguridad.
Berti ha señalado que no se debe asumir que la asistencia militar va a solucionar la inestabilidad, sino que esto también debe venir de un empoderamiento, de mejorar las infraestructuras y del desarrollo económico, entre otras, y ha añadido que la OTAN no se encarga de estos temas, aunque ha sostenido: «Podemos jugar un papel, contribuir a la estabilidad».
Preguntada por la preocupación de la OTAN en el área del Sahel, Berti ha respondido que se trata de un área que no está en el atlántico, por lo que no estaría cubierto por el tratado, pero «puede haber discusiones políticas» al respecto.