Existen dos factores fundamentales a tener en cuenta a la hora de asar las costillas para que queden sabrosas y jugosas. Evita que se queden secas elaborando un aliño y ajustando el tiempo de horneado.
3Otros aliños
Si el majado de ajo no te seduce puedes elaborar otro tipo de aliño para añadir a las costillas asadas. Es muy habitual utilizar una salsa barbacoa, pero también puedes emplear zumos, salsas y otros condimentos diferentes. Lo más importante es bañar la carne durante el horneado para que se impregne el aliño en las costillas consiguiendo una mayor jugosidad. Si además de conseguir la textura perfecta para el paladar quieres potencial el sabor puedes macerar las costillas previamente.