El arroz blanco es una de los alimentos más consumidos en nuestro país, no digamos ya en países orientales, donde es la base absoluta de la alimentación y su consumo es diario e incluso en varias comidas, al margen de recetas. Pero es un alimento tan sencillo, que a muchos les parece insípido, por lo que al final se usa como guarnición y se mezclan con ingredientes, salsas y especias que le de sabor. Tiene arreglo y puedes disfrutar de un arroz blanco delicioso sin mayores aditamentos, gracias a los trucos de grandes chefs.
5CUIDADO CON EL ‘AL DENTE’
Lo decimos porque mucha gente lo usa como si fuera pasta, creyendo que es un tipo de producto parecido y que por tanto tiene unos modos y tiempos similares. Pues no es así, porque el ‘al dente’ en el arroz no es el de la pasta: en el primero no es idóneo como lo es en el segundo caso, salvo que por motivos de dieta el arroz deba poseer un menor índice glucémico.
En cambio, demasiado tiempo en la olla o cazuela hará que los granos se peguen entre sí, creándose una textura blanda y gomos, nada apetecible. Así que, una vez más, comprobamos que los tiempos y proporciones son vitales.