Juan Carlos Monedero no pierde el tiempo. Apenas le pega el tufo de la izquierda y sale corriendo a ver qué nuevos negocios surgen, porque, desde luego, su «astucia» política debe llegar a los más profundos cimientos de las «revoluciones» latinoamericanas, tal como ya lo hizo con Venezuela, y es por eso que aterrizó, el pasado fin de semana, en Bogotá, para ser testigo, de primera línea del triunfo del exguerrillero Gustavo Petro, como nuevo presidente de Colombia.
Conmovido, hasta las lágrimas, el ex cerebro de Podemos celebró la victoria del primer presidente de la izquierda del país suramericano y el cambio político que hubo en las elecciones del pasado domingo 19 de junio, porque para el exlíder de la tolda morada, el hecho de que un ex guerrillero colombiano se convierta en presidente es sinónimo de «volver a respirar la esperanza en este continente», tal como lo expresó en su cuenta de Twitter.
Todo parece indicar que el «astuto» Monedero no perderá el tiempo y tratará de reeditar en Colombia lo que alguna vez hizo en Venezuela con Hugo Chávez, a quien se le incrustó desde 2005 hasta 2010, como «asesor político»; labor que seguramente le dejó un montón de «beneficios», pero que lo mantiene, desde hace años, en la mira de las autoridades judiciales españolas, que han tratado de llegar al fondo de los presuntos financiamientos irregulares que se hicieron desde el régimen venezolano y que sirvieron para financiar la creación de Unidas Podemos.
Entre los aspectos que la justicia española investiga está la presencia de Monedero en Venezuela, quien supuestamente habría recibido en varias oportunidades dinero en efectivo para financiar a su formación política, de hecho, Hugo Armando «El Pollo» Carvajal, exjefe de la Contrainteligencia del gobierno de Hugo Chávez, declaró ante la Audiencia Nacional que el exlíder de Podemos supuestamente utilizaba un testaferro para sacar dinero desde el país caribeño hasta un banco en Suiza.
Monedero es bien conocido en Venezuela porque destacó como uno de los ideólogos de l chavismo, con línea directa con el fallecido dictador venezolano Hugo Chávez Frías. Tenía una oficina en las torres de Parque Central, en pleno centro de la capital venezolana, donde funcionaba el Centro Miranda. Contaba con un auditorio que pertenecía al Centro Simón Bolívar y jamás se supo si pagaba por utilizar este espacio o si era cedido por el régimen venezolano, como parte de pago «por los favores recibido».
Durante su estadía en Venezuela no era muy amigo de la idea de hablar con los medios de comunicación de ese país, porque mantenía una estrecha relación con Chávez y su círculo más íntimo. De hecho, no se debe descartar la idea de que pretenda repetir en Colombia la experiencia que desarrolló en Venezuela con el Centro Miranda, donde se adoctrinaba a los miembros de los círculos bolivarianos, que años después se convirtieron en los grupos armados del chavismo en ese país.
Personas muy allegadas al chavismo en Venezuela contaron a este medio que la organización que tenía Monedero en Caracas solía organizar foros y talleres de formación sobre el «poder popular», las malas praxis del capitalismo y cómo revertir esta tendencia política hacia el socialismo.
Monedero y el resto de los españoles que formaban parte de su equipo de «asesores» solían hospedarse en el hotel Hilton, ubicado en el centro de Caracas, muy cerca de donde tenían su centro de operaciones. Cuentan que era muy habitual ver desfilar por el lobby del hotel a muchos dirigentes políticos regionales del Partido Socialista Unidos de Venezuela (PSUV) y que el lugar se convirtió en el ágora de los negocios del chavismo con este grupo de asesores españoles.
Por aquellos tiempos también solía pasearse por el hotel venezolano la ex senadora colombiana Piedad Córdoba, quien también se ha hecho famosa en el mundo por sus vínculos con el chavismo y quien también tenía mucha relación con los que conformaban el Centro Miranda que encabezaba Monedero.
Con todo este prontuario «político» de la relación de Monedero con la dictadura chavista, lo más seguro es que su acercamiento a Petro vaya con las intenciones de seguir vendiendo el humo de la ideología de izquierda en el continente americano, para seguir haciendo «negocios» con los gobiernos rojos de la región.
Mientras Monedero mueve sus fichas por Colombia, en España lo siguen investigando, porque el testimonio que ofreció el ex jefe de la inteligencia militar venezolana ante la audiencia nacional en marzo, sirvió para reavivar la investigación que hay sobre Podemos, sus líderes y el origen de los fondos que le dieron vida al partido político que fundó este personaje junto a Pablo Iglesias en 2014.
Habrá que alertar, desde ya mismo, a todas las autoridades españolas y en especial a la Fiscalía y los juzgados, para que estén atentos a los movimientos que haga Juan Carlos Monedero por Colombia, para que se vayan preparando, porque si le salen bien los planes, tendrá trabajo en el continente americano por un buen rato más.
