Después de varios meses de investigación, funcionarios de la Policía Nacional anunciaron la captura de ocho personas implicadas en el robo de más de 400 mil euros en relojes de alta gama; entre los que había cuatro venezolanos, un marroquí, un italiano y dos rumanos, que mediante el uso de armas de fuego y con violencia, abordaban a sus víctimas en los barrios más pudientes de la ciudad, para despojarlos de sus prendas. Los implicados fueron detenidos en varios procedimientos.
En total, les atribuyen la comisión de por lo menos 19 asaltos, cometidos en diversos puntos de la ciudad, específicamente a la salida de discotecas, en terrazas y en las vías públicas, donde se valían de la congestión vehicular para atacar.
Fuentes del organismo policial señalaron que el modus operandi utilizado por algunos de los detenidos era conocido en países de Suramérica como los moto clock, que consiste en abordar a las víctimas trasladándose en motocicletas, las golpeaban en la cabeza con un arma de fuego y procedían a robarlos.
Estas personas fueron detenidas en distintos procedimientos policiales, tras un seguimiento que hizo la policía, ente la cantidad de denuncias que habían recibido en las cuales todas las víctimas tenían un elemento en común: habían sido despojados de un costoso reloj.
La primera denuncia fue en febrero, en el distrito de Salamanca, cuando la víctima denunció que había sido despojada de un reloj valorado en 40.000 euros por dos delincuentes que lo siguieron, en una motocicleta, hasta un aparcamiento, donde lo sometieron y lo robaron. Lo que llamó la atención de la policía fue la violencia empleada por estos asaltantes.
En marzo fue detenido otro de los ladrones, quien fue sorprendido por funcionarios de la Unidad de Intervención Policial (UIP), minutos después de que había despojado a una persona de otro reloj, después de abrirle la puerta del vehículo y forzarlo a entregar un reloj valorado en 80.000 euros. El detenido inicialmente se trasladaba en una moto y aprovechó el tráfico que había a esa hora; se bajó de la motocicleta y fue cuando procedió a abrir la puerta del coche de la víctima para robarlo. Fue aprehendido cuando sufrió un accidente mientras intentaba huir. La rápida acción de la policía impidió que el delincuente huyera y pudieron recuperar la prenda robada.
Las investigaciones determinaron que esta misma persona había participado en por lo menos otros cuatro robos con violencia que habían sido cometidos en Madrid durante los últimos meses.
Los funcionarios policiales continuaron haciendo seguimiento a las denuncias que habían recibido en el distrito de Salamanca sobre otros delincuentes que abordaban a jóvenes cuando salían de las discotecas de la zona por las noches de los fines de semana. A diferencia de los otros casos, en estos no empleaban la violencia, sino que fingían gestos amistosos para acercarse a las víctimas y era cuando procedían a despojarlas de sus relojes de lujo.
A los que actuaban con mayor violencia, que eran los venezolanos que utilizaban la culata de una pistola para atacar a sus víctimas, les estuvieron haciendo seguimiento desde octubre del año pasado, tras recibir varias denuncias de robos de relojes de alta gama. Se les investiga por estar relacionados en al menos siete casos de robos con violencia.
Los funcionarios tenían información de varios casos de víctimas que habían sido atacados en las terrazas de bares y restaurantes de las zonas de Salamanca, Chamartín y Hortaleza, donde los victimarios llegaban a bordo de motocicletas, siempre en pareja y tras golpear a las víctimas los despojaban de sus relojes. Estos fueron los últimos en ser detenidos, tras varios dispositivos policiales desarrollados en varios puntos de la ciudad.
En el caso de los venezolanos, tres de ellos fueron presentados ante un juzgado y permanecerán detenidos, por presentar antecedentes policiales y el cuarto fue dejado en libertad. Para el momento de su captura, dos de ellos estaban completamente indocumentados, mientras que las autoridades lograron determinar que un tercero permanecía en España con una residencia por razones humanitarias.
Entre los detenidos de las demás nacionalidades, las autoridades policiales también informaron que en el caso del marroquí también tenía antecedentes penales por otros casos de robos con violencia.