El solomillo es una de las carnes más agradecidas. Además de quedar bien con todo, cuenta con muchos beneficios y además es muy sencilla de preparar. Sobre todo, si le añades ajos a la preparación.
Esta receta es perfecta tanto si tienes invitados en casa como si quieres darte un homenaje aunque no tengas demasiado tiempo para estar en la cocina. Esto, además, la hace ideal para el verano, cuando no se tienen demasiadas ganas de cocinar.
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7El paso para que el solomillo adquiera todo el sabor
Después de que los ajos estén bien dorados, es el momento de volver a utilizar el solomillo que has apartado en el primer paso. Agrégalo a la misma sartén, salpimenta a tu gusto y añade también el medio vaso de vino blanco. De este modo, el juego de sabores comenzará a prepararse y pronto podrás disfrutar de un resultado digno de un auténtico chef para el que tan solo habrás precisado de unos minutos de tu tiempo.
