Más allá de los tratamientos existentes para combatir la caída del cabello, hay una serie de hábitos que pueden ayudar a evitar que esto suceda. Existen factores como los genéticos, la edad y enfermedades, que pueden acelerar la caída. Otros factores pueden ser: cuero cabelludo dañado (por decoloraciones, coloraciones y uso diario de artefactos de calor) y situaciones de estrés. También puede ser deberse a una «caída estacional», que se produce con más frecuencia al inicio de la primavera y del otoño. Pero, independientemente de la causa, se pueden empezar a aplicar algunos consejos para controlarlo.
8Abandonar el tabaco
Según los expertos, la nicotina y el humo del tabaco están relacionados indirecta y directamente con la caída del cabello. Las sustancias químicas (y tóxicas) que tienen los cigarros afectan al flujo sanguíneo y al ADN del cuero cabelludo. También ocasiona que la zona coronaria se seque y no cuente con los nutrientes adecuados para que crezca sano el pelo. Si dejas de fumar, mejorarás tu pelo. Este, ganarás vitalidad, no se te secará tanto la cutícula, ni tendrás frágil la fibra capilar, entre muchas otras ventajas relacionadas con tu salud y tu estética.