El vicepresidente de la Junta de Andalucía y coordinador de Cs en Andalucía, Juan Marín, ha asegurado este viernes sobre la fecha de las elecciones al Parlamento de Andalucía que «todavía no me lo ha comunicado», en referencia al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, para reivindicar que el acuerdo entre ambos es que «el primero en saberlo sería yo» y trasladar que «de momento no me ha llamado, aquí seguimos ocupados, trabajando, seguimos en el día a día, elecciones de momento no ha anunciado».
En una entrevista con TVE, Marín ha descartado, pese a su discrepancia pública con Moreno sobre la convocatoria previsible en junio frente a la opción de hacer las elecciones en octubre, que exista división en el Gobierno andaluz tras poner de manifiesto que «si alguien pretende que haya división en este Gobierno se vuelve a equivocar» y considerar que «algo tan duro como la pandemia nos ha unido mucho más».
El vicepresidente de la Junta ha sostenido sobre sus relaciones con Moreno que «como siempre, somos amigos, compañeros» para asegurar que ambos tienen en común la aspiración de «transformar Andalucía desde dos visiones distintas» y augurar que «va a seguir habiendo relaciones, cada uno con nuestras siglas».
Marín ha admitido sobre el desenlace de la legislatura con la celebración de las elecciones en junio en vez de octubre, dos fechas que el propio Moreno manejó públicamente como posibles para hacer las andaluzas, que «son ya casi cuatro años, estamos terminándola», aunque ha precisado que «nos quedan cosas que acabar» para seguidamente hablar del futuro y plantear el deseo de que «esperamos tener la oportunidad los próximos cuatro años de seguir transformando esta tierra», convencido de que siendo «una de las legislaturas más complicadas, estamos satisfechos, orgullosos del trabajo hecho».
Preguntado si ha asumido el adelanto de las elecciones a junio tras su evidente rechazo, Marín ha sostenido que «he dicho lo que pensaba», reacción que ha reivindicado como «la mayor lealtad en un Gobierno de coalición», antes de reconocer que «la decisión es suya» para reafirmarse en que «quizás no es el mejor momento», así como en «la lealtad de decirle lo que pienso».
El vicepresidente de la Junta y coordinador de Cs en Andalucía ha desgranado diferentes razones para desaconsejar el adelanto por cuanto «estamos en un momento de crecimiento económico, estamos desplegando los fondos europeos, Andalucía sigue creciendo al ritmo del 4,5%, el turismo está tirando del empleo, ahí tenemos los datos de la Semana Santa, y por delante tenemos un verano espectacular».
Marín ha descartado que la celebración de elecciones en junio traiga bajo el brazo contar con un Presupuesto para 2023 al sostener que «es una aspiración que nadie garantiza tener presupuesto» después de esgrimir aspectos como «los plazos para constituir el Parlamento».
«Nadie puede garantizar tener presupuesto para 2023 porque haya elecciones», ha sostenido Marín, quien ha recordado entonces que «en Castilla y León han tardado dos meses en conformar Gobierno».
«NO CREO EN LOS SONDEOS, CREO EN LOS CIUDADANOS»
Sobre las expectativas de su partido, caracterizadas por sondeos que auguran dificultad para tener diputados en el Parlamento de Andalucía frente a los 21 que tiene Cs en estos momentos, Marín ha defendido que «no creo en los sondeos, creo en los ciudadanos, en los andaluces, en las urnas» para esgrimir que «lo que me traslada la calle nada tiene que ver con los sondeos», mientras que ha reivindicado la continuidad de las siglas de Cs en solitario en las andaluzas porque «defiendo el proyecto de centro, liberal y progresista, que se llama Ciudadanos».
El coordinador de Cs en Andalucía se ha aferrado a «me quedo con la coalición que hemos formado PP y Cs, que ha funcionado en Andalucía, ha funcionado y tiene que seguir funcionando» para dar cuenta entonces de su deseo de que «podamos continuar con esta labor, con esta fórmula» de la coalición.
Marín ha desechado el cordón sanitario para aislar a Vox al instar a «no poner ningún cordón» y expresar entonces su rechazo al hecho de que este partido diferencia entre «andaluces buenos y malos», una diferenciación que «no comparto» para reivindicar que «todos los andaluces son buenos, piensen lo que piensen, voten a quien voten, profesen la religión que profesen» y reafirmarse que «no comparto con Vox discriminar a la mitad de la población que no piensa como yo», antes de asegurar «cómo voy a cogobernar» con este partido con esas diferencias de fondo.
Tras aludir a que pese a que Vox ha sido socio parlamentario del Gobierno de PP y Cs, Marín ha defendido que «las políticas que hemos puesto en marcha son de Ciudadanos y PP» y se ha mostrado incrédulo con la propuesta del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, para dejar gobernar a la lista más votada por considerar que «nunca la cumplen» y sostener que «llevo escuchando esto 40 años», para lo que se ha remitido a diferentes ejemplos de la propia Andalucía para argumentar su escepticismo, por cuanto el PSOE ganó con Susana Díaz las elecciones autonómicas en 2018 y el PP lo hizo con los 50 escaños de Javier Arenas en 2012 y en ambos casos no se respetó la lista más votada.
Marín ha asegurado que «no temo nada» sobre el resultado de las elecciones porque ha considerado que «nos equivocamos los políticos, no los ciudadanos» y argumentar que «sea cual sea el resultado al menos podemos decir que cumplimos».