Esta Semana Santa se caracteriza por una deseada vuelta a la casi normalidad. Aunque algunas medidas de control siguen vigentes, sobre todo en viajes internacionales, ya no hay restricciones de movilidad. La relajación en lo que se refiere a la percepción del riesgo por la pandemia se está dejando sentir, y los espacios de ocio se llenan, a la vez que los españoles hacen las maletas para desplazarse a lo largo del país en busca de unos merecidos días de descanso. Los viajes en coche son lo más habitual en estas fechas, como también lo son los temidos y odiados atascos.
5JUEVES SANTO, EL DÍA MÁS COMPLICADO
El jueves 14 de abril, ocurrirá todo lo contrario. Las personas que no hayan podido viajar el miércoles, tratarán de aprovechar el día, y elegirán conducir por la mañana, con la intención de llegar antes da su destino. Esto provocará numerosos atascos en las salidas y las entradas de algunas ciudades españolas. Sin embargo, sí se podrá viajar por la tarde sin estrés y haciendo el trayecto previsto en mucho menos tiempo, lo cual, teniendo en cuenta el precio de los combustibles, puede ser una opción a considerar.