La noticia de que un familiar, amigo o conocido cercano tiene problemas de adicción a las drogas nunca es fácil de aceptar y procesar. Quienes conocen en profundidad estos casos entienden la dificultad y afectación que traen como consecuencia, tanto al adicto como a su familia. Existen diferentes espacios que ofrecen ayuda a las personas que necesitan acceder a la desintoxicación, recuperación y tratamiento de adicciones. Sin embargo, el proceso se hace más complejo cuando el implicado directo no acepta su adicción ni está dispuesto a iniciar un tratamiento. En estos casos, una alternativa altamente eficaz es acudir a un Intervencionista Familiar en Adicciones.
El proceso a seguir para lidiar con adicciones
Por alarmante que sea la situación, el recurrir a la fuerza o ejercer presión al adicto para buscar ayuda es un acto hostil e incluso destructivo. Hay que tener en cuenta que los programas relacionados con la desintoxicación suponen tener que afrontar importantes afectaciones emocionales y psicológicas. Por lo tanto, lo principal es preservar la seguridad y derechos del sujeto en cuestión. Una mala experiencia no solo generará consecuencias graves para él, sino también para su familia. Por lo tanto, la mejor opción es acudir a la experiencia de los profesionales.
Los servicios profesionales del Intervencionista Familiar en Adicciones José López Navarro ofrecen a las familias un acompañamiento especializado que se centra en hacer la función de mediador entre el consumidor y su familia. El método parecido al de Hermano mayor busca que las familias puedan descansar en la labor del Intervencionista, que por medio de técnicas prácticas lleva al afectado a reconocer su condición, aun cuando se comporta de forma negacionista.
La estratégica y sutil intervención para prevenir consecuencias graves
Por difícil que parezca, José López Navarro sugiere una Intervención que genera resultados muy positivos en el proceso, basada en la involucración de la familia. Se trata de un acompañamiento y seguimiento cercano en el que el objetivo es persuadir al paciente a optar por el tratamiento. Según el Intervencionista, la familia es el círculo más íntimo y consciente de la situación, por lo que su participación y apoyo genera un soporte sólido al adicto en el que puede confiar.
La Intervención Familiar para tratar la adicción le permite a la familia brindar herramientas muy útiles para ayudar al afectado a erradicar su consumo con el paso del tiempo. Este proceso aplicado por José López Navarro ha demostrado un elevado porcentaje de éxito en muchas personas que ya han conseguido volver a la normalidad gracias a su intervención.