¿Puedes escuchar la palabra torreznos y no salivar? Nosotros no. No sabemos qué nos ocurre con este alimento que nos hace cerrar los ojos e imaginarnos una ración de este plato y comenzar a disfrutar solo con ello. Pues bien, mucho ojo, porque está riquísimo, pero es cierto que hay que saberlo a hacer, porque siempre se cometen algunos fallos que te lo arruinan.
Los torreznos es un plato muy socorrido para las grandes veladas. Lo puedes poner en una cena con amigos en tu jardín, o incluso lo puedes hacer cuando son fiestas en tu pueblo o para un cumpleaños. Ahora bien, es un producto muy sensible que para que te salga de 10 hay que saber hacerlo a la perfección.
1De dónde viene los torreznos
Los torreznos son una tira de tocino frita o salteada en sartén o tostada en una parrilla. Habitualmente los torreznos quedan crujientes y dorados por el lado de la piel, lo que los convierte en apetecibles a los consumidores. Ahora bien, para lograr esto hay que ser un experto y no cometer los típicos fallos.
Ya sabes que suelen comerse como tapa o como guarnición. Y como dato cultural, actualmente son considerados patrimonio gastronómico de la humanidad por la UNESCO.Y no es para menos, porque nosotros nos consideramos muy fans de este alimento que nos hace salivar solo con pensar en él. En Soria tienen su propia marca.