La Semana Santa está a la vuelta de la esquina. Por culpa del coronavirus volverá a ser con muchas restricciones, por lo que una buena idea es quedarse en casa degustando sus tradicionales postres de la época. Las torrijas son las que tienen la fama de toda la vida, pero en este caso te proponemos las rosquillas. Un postre que te hará olvidar las torrijas para siempre.
Y es que gracias a esta receta se terminaron esas rosquillas duras al día siguiente de haberlas hecho. Estas aguantan tiernas toda la semana incluso algún día más. Nos ponemos el mandil y nos preparamos para hacer este postre con el que serás el mejor anfitrión durante la próxima Semana Santa.
5Preparación del almíbar
En lo que dejamos reposar la masa de las rosquillas de Semana Santa, vamos haciendo el almíbar con los ingredientes que te mencionamos anteriormente. Ponemos una olla al fuego a temperatura media con agua. Añadimos el azúcar, la miel (opcional), dos palitos de canela, la piel de naranja muy bien lavada y el licor de anís, por supuesto si se quiere. Mezclamos hasta hervir.
Dejamos cocer durante 5 minutos. Luego apagamos y tapamos la olla y dejamos reposar. Es el momento de volver a la masa que dejamos reposando. Con las manos mojadas en aceite, así no se nos va a pegar en los dedos. Vamos cogiendo la masa, hacemos una bolita y le damos forma de rosquilla.