El microondas es un electrodoméstico ya imprescindible en las cocinas actuales. Además de calentar rápidamente cualquier cosa, también descongela, hierve, guisa y hornea, así que lo habitual es usarlo diario. Esto provoca que se ensucie también con bastante facilidad, incluso aunque utilicemos la correspondiente tapa protectora. Lo que también es frecuente, es descuidar un poco su limpieza, lo cual es un error, porque al alcanzar temperaturas tan elevadas, las manchas de salpicaduras y de grasa, son más difíciles de quitar.
2CON LIMÓN
Empezamos con el truco del limón. Podemos cortarlo en dos partes o exprimirlo y usar su jugo. Ponemos el zumo o los trozos de limón en un recipiente, como un vaso de cristal, junto con 300 ml de agua. Añadimos una rama de perejil o un poco de bicarbonato. Lo metemos en el microondas y ponemos en funcionamiento a máxima potencia durante 5 minutos para que el vapor se expanda generosamente por el interior del electrodoméstico. Este vapor ayudará a reblandecer la suciedad. Transcurrido ese tiempo abrimos el microondas y sacamos el recipiente con mucho cuidado. Seguramente pasamos una bayeta por el interior para retirar todos los restos.